Síes
1. Sí a una novela diferente, fuera del dramatismo convencional, con un libreto con frases ciertamente divertidas.
2. Sí a Silvia Navarro, en un papel tan diferente. Y qué arte en el tubo. Fantástica.
3. Sí a la pareja Salinas-Navarro, especialmente esas conversaciones divertidas y jocosas en las que se decían más bien nada, pero que eran de agradecer. Aunque en lo que a la besadera no les veía yo muy finos.
4. Sí a la relación Navarro-niños, desde Paulina hasta la más pequeña, especialmente las escenas con Paulina que parecían naturales, sin un guión detrás. Se nota lo mucho que los niños quieran a Silvia fuera de pantalla.
5. Sí a Mayrin Villanueva. Aunque el personaje acabó yéndose de cabeza por el precipicio del absurdo, ella estuvo fantástica toda la novela.
6. Sí a la relación Jennifer-Juan, aunque no soy yo muy fanática de me quedo con mi amigo por el que jamás sentí nada hasta que un día, mil doscientos años después, ¡aiba, me enamoré!, pero tanto Adrián como Fabiola andaban estupendos ambos dos.
7. Sí a tratar distintos temas con los niños, si bien he echado de menos temas con un poquito más de importancia e injundia.
8. Sí a la progresión en el personaje de Fernando, paulatina al enamoramiento por Ana. Acertado.
9. Sí a Diego Lascurain, buen personaje, necesario en la historia. Pena la desaparición tan temprana y el regreso tan pobre.
10. Sí a celebrar las alegrías y demostrar el amor a la gente que uno ama, todos los días sin excepción. Geniales los recibimientos, aunque en una familia normal se llevarían el presupuesto de un mes.
Noes
1. No al final, aunque ciertamente hay alguna cosilla salvable, se hizo tedioso, fastidioso y absurdo, especialmente con el bautizo en el estadio. No hay necesidad.
2. No a León, como primer novio estupendo, como hombre con el que pasar el resto de tu vida, pues si me das un somnífero cada vez que hable, tal vez, tal vez. Y qué decir del niño, las conversaciones son inverosímiles hasta decir basta. Infumable.
3. No a quedarnos con el primer amor porque es el primer amor. Lo único inteligente que hace Fanny en toda la novela es decirle a León que no se casa con él. Los primeros amores no siempre son los definitivos, y no hace falta casarte a los veintipocos por el miedo absurdo a quedarte sola o a que se te pase el arroz.
4. No a hacer absurdos en la novela porque se entiende que es novela familiar, para luego tener un libreto no muy infantil precisamente. Confusión.
5. No a estirar el secreto de Ana como chicle Boomerang, más que bailar pole dance, pareciera que el secreto era el de la Coca-cola o que ella era asesina en serie. Compensado por Silvia y Jorge, y su actuación.
6. No a la boda Fernando-Isabella. Es peor para un hijo que sus padres vivan en un matrimonio sin amor, a que no estén juntos pero tengan buena relación. Mal mensaje.
7. No a los finales alternativos. ¿Qué ha sido eso? Casi mejor no grabar nada.
8. No a la relación enfermiza entre Edith y Fanny. Rallando lo obsesivo.
9. No a los momentos exagerados, absurdos y ridículos. Tedioso.
10. No a una dirección de escena muy estática y pobre para el estilo de escenas a grabar, un estilo dramático para una novela no dramática.
No hay comentarios:
Publicar un comentario