Hay novelas que debería estar prohibido que fuesen objeto de adaptación o refrito, incluso cuando se trata de una adaptación. Claro ejemplo lo veo con Cuna de Lobos, que rezando me hayo al Olimpo Novelero para que semejante desatino no ocurra, sólo hay una Catalina Creel y debería ser considerada casi como patrimonio novelero. Pero no me quiero adelantar, no quiero llamar a la mala suerte de un refritón (nuevo vocablo para semejante ofensa), si no que voy a optar por hablar de una novela que sí que ha sido adaptada, esto es, Pasión de Gavilanes y su adaptación Tierra de Reyes que se le ha ocurrido a Telemundo traer al mundo novelero. Pero, ¿por qué? ¿Por qué Telemundo le hace algo así a su propia producción? ¿No tuvimos suficiente con aquel horror llamado Fuego en la Sangre? Sí, tuvimos más que suficiente. Digo tuvimos cuando en realidad yo no pude verla más que por encimita, pasando de puntillas para darme cuenta que no era más que un quiero y no puedo. En fin, a veces a Televisa se le va la mano, eso es así.
Dicho esto, creo que es obvio, queda más que claro, que yo fui una fiel seguidora de Pasión de Gavilanes, y no sólo yo, en España fue todo un fenómeno, hasta los no noveleros oyeron hablar de esta novela. Sí que es cierto que algo de absurdo reinaba en la historia, tres hermanos para tres hermanas, bien pareciera una mini copia de la famosa y clásica película Siete novias para siete hermanos, aunque en ésta las muchachas no eran hermanas entre sí. Ya que la menciono, desde aquí recomiendo la película a todo aquel que disfrute de los clásicos. Pero el mundo novelero es así, a veces el eje central más absurdo llega a enganchar y a maravillar por partes iguales, y eso sólo se consigue con un buen libreto, unos buenos personajes, una buena producción.
Ahora con Tierra de Reyes, le doy sus puntos a favor, en primeras Aaron Díaz en el personaje que en su momento diera vida Mario Cimarro, está más que correcto, le ha dado su propia huella, su propia esencia, pero ello no puede borrar de mi mente a ese Juan Reyes que en su momento todas queríamos tener en nuestra vida, rudo sí pero con un corazón que no le cabía en el pecho. Gonzalo García Vivanco, ¿qué decir de él? Aún no he visto nada de este actor que no me guste, me ganó con su Lucho en La Patrona y no ha sido muy complicado para él superar a Juan Alfonso Baptista, punto a favor para esta nueva producción. Otro punto a favor son algunos de los cambios que les han hecho a los personajes y a la trama dentro del libreto, dándole ciertos giros o aires nuevos que a quien sigue la novela desde el primer día deben gustar y mucho. Y hasta aquí llegué. Hasta aquí llegué con mis puntos a favor porque todo lo demás no son más que puntos en contra, así en cuanto al libreto, algunos diálogos son excesivamente edulcorados y pretenciosos que no cuadran con la línea que, parece, se pretende seguir.
Entre Aaron Díaz y Ana Lorena Sánchez no veo la química que veía entre Mario Cimarro y Danna García, tal vez porque esa química es difícil de superar, tal vez, o tal vez porque no han hecho ese click necesario para que una pareja protagónica te enamore. Sonya Smith, como matriarca, está más bien tirando a forzada, a ella le quedan bien papeles como el de ¿Dónde está Elisa?, la naturalidad es su punto fuerte, pero también su debilidad a la hora de afrontar otro tipo de personajes. En cuanto a las dos actrices encargadas de dar vida a las otras dos hermanas Del Junco (Elizondo), las encuentro más bien sosas, que ni chicha ni limona'. Las historias secundarias, esas que deben darle cierta gracia a la trama van a un paso caracol que lo único que produce es somnolencia, les aplaudo que no se trate de hastío, aunque tiempo al tiempo, apenas llevan treinta y tres capítulos emitidos. Si a la cantante, esa genial Rosario Montes de Pasión de Gavilanes, la matan de aquí a mañana no creo que nadie note su ausencia, yo incluso lo agradecería. O podrían copiar desde Telemundo a Televisa y dejar al mismo personaje pero con distinta actriz, y con esto ya le estoy dando más palabras escritas de las que amerita. En cuanto al abuelo, qué se puede decir, que donde esté el abuelo Martín de Pasión de Gavilanes, ningún otro le hace sombra.
Y hasta aquí llegué hoy. En conclusión, las grandes novelas deben quedar en dónde deben estar, en la estantería del recuerdo, en el revisionado y no en el refrito.
No es una adaptación de Pasión de Gavilanes sino de Las aguas mansas, Pasión de gavilanes da vergüenza ajena comparada con la original.
ResponderEliminarJoder chaval si pasión de gavilanes fue mala para ti ahora imaginais está de tierra de reyes
EliminarPasion de gavilanes superó en popularidad y produccion a la original Las Aguas Mansas. Sorry pero es la verdad ;)
EliminarScarlet gruber que hace a Andrea estuvo tremenda es alucinante lo que transmite esa chica
ResponderEliminar