Desde que vi a Ariadne en La mujer del vendaval me pareció una muñeca, en el buen sentido de la palabra. De esa clase de actrices que la ves en pantalla y no te parece que haya tenido que usar la brocha de pintor para acicalarse la cara, que sale con ese look arreglado pero casual y le queda bien, a ella y al personaje, de esas actrices que con una mirada dicen lo que tienen que decir, sin necesidad de palabras, lágrimas, o aspavientos. Y a mi eso de ella, me encanta.
Ariadne Diaz ha conseguido en La Malquerida algo que a mi me parece maravilloso, conseguir que te amen y te odien a la vez, lo que se denomina por ahí como amorodio. Es cierto que los libretos o guiones han ayudado sustancialmente a ello, tantas idas y venidas de su personaje, tantos dimes y diretes, pero no sé por qué creo que, de no haber sido ella, no se habría conseguido. No habrían aparecido las ganas de abrazarla y consolarla un minuto y al minuto siguiente abofetearla, o dicho más jocosa y vulgarmente, darle con toda la mano abierta.
Lo cierto es que la presencia de Ariadne en pantalla, su forma de llevar a Acacia por los difíciles senderos de la bipolaridad, ante los que se deberían haber planteado seriamente introducir un psiquiatra como personaje en la novela, aunque cualquier día Héctor postula para ello, ha sido, a mi entender, perfecta. El personaje puede gustar más o menos, la actitud del mismo puede agradar o desagradar, se puede estar de acuerdo o en desacuerdo con sus actuaciones, pero lo cierto es que ha encendido comentarios, e incluso, pasiones encontradas. Me pregunto, ¿cuántas actrices hubiesen podido llevar tan bien el cambio de niña mimada a mujer fatal que trata de seducir a su padrastro? ¿cuántas actrices hubiesen conseguido que se entendiese al personaje y a la vez se le detestase? Por mi parte, tengo claro que muy pocas.
Sí bien es cierto, que tanto vaivén, tantas idas y venidas no han estado del todo bien planteadas, no es menos cierto que la química entre Ariadne y Meier es del todo innegable, incluso perfecta, aunque en la situación de Acacia ¿no es normal tener dudas frente al hecho de que es el marido de tu madre el hombre que te intenta conquistar y al que tú intentas conquistar? Yo tengo claro que sí, que fácil no puede ser. Pero, ¿quién dijo que el amor es fácil? O, ¿quién establece lo que es correcto o incorrecto? Lo cierto es que a Acacia le ha faltado decisión, o para bien o para mal, pero decisión. Si le dices al susodicho que sientes lo mismo que él, si lo buscas, si lo besas, e incluso, previamente, si le coqueteas descaradamente, inclusive cuando estás enfadada con él, debes actuar en consecuencia.
No se puede decir un día sí, un día no, besarle apasionadamente y después decirle que lo vuestro no puede ser, o lo que es aún peor, besarte con él y después decirle a tu madre que debe reconquistar al marido, o besarte con él, decirle que vas a intentar ese amor prohibido, y tres segundos después acordarte de tu madre. Lo coherente es acordarte de tu madre antes de tan amoroso encuentro. Creo que lo más apropiado hubiese sido dotar al personaje de Acacia de una malicia in crescendo, que la orillase a intentar emparejar a su madre con Héctor, no una malicia veleta, que lo único que produce es preocupación por la muchacha, tantos "no sé" saliendo de su boca no son ni medio normales.
Cuando uno lucha, lucha. Cuando uno intenta algo, lo intenta. Cuando uno se siente culpable, se siente culpable. Cuando uno quiere algo, lo quiere. Cuando uno no quiere algo, no lo quiere. Cuando uno ama, ama. Así de sencillo. No pueden existir las medias tintas en este vida, porque las medias tintas, el no actuar como se debe, se quiere, o se desea, el no hacer las cosas correctamente y con valentía, con decisión, con arrojo, con la cabeza alta, es lo que lleva a lo irremediable. Tal vez sea una romántica, o tal vez sea una soñadora, tal vez, pero, y lo hermoso qué es que te ame con locura, pasión y devoción, el mismo hombre al que tu amas con locura, pasión y devoción. ¡Ay qué hermoso es! Y que sencillamente maravilloso.
Me has emocionado hasta las lágrimas, sobre todo después de ver como están destrozando el personaje de Esteban que ha pasado de ser un ser humano bueno y noble. A convertirse casi en la encarnación misma del mal. Yo adhiero a tus conceptos, de hecho dudo que hubiera podido expresarlo mejor, y aunque no me considero una romántica, sé que soy apasionada, vehemente, sobre todo en lo que refiere a sentimientos. Si amo, AMO, y si decido alejarme de una persona, lo hago sin dar marcha atrás. Al igual que las demás #Estecias que seguimos y amamos esta pareja, pensamos siempre que no decidís estar con el ex esposo de tu madre porque te sentís protegida, o contenida. Eso lo haces con un amigo, por si sale bien y te llegas a enamorar, pero no intentas algo así con tu padrastro si de veras no lo amas. El Güero Castro quiso mostrar algo distinto pero me animo a decir que la reacción de un segmento del público que esperaba la típica historia de buenos y malos, lo condujo a caer en el lugar común de convertir algo prohibido en la acción maquiavélica de un villano. Creo que la pareja de Acacia y Esteban cobró tanta relevancia y protagonismo que opacó al resto -incluso al personaje de la Ruffo- y que eso hirió susceptibilidades. Entonces, solo quedó la opción de convertir a Esteban en alguien siniestro para poder sacar esa pareja y esos PROTAGONISTAS del lugar donde el público los colocó: el de sus personajes dilectos.
ResponderEliminarComo espectadora me siento profundamente decepcionada, no por no tener el final tan anhelado para esta pareja que en mi humilde opinión merece ser feliz, sino porque una historia que pintaba original y distinta terminó siendo mas de los mismo: ricos y pobres, buenos muy buenos, malos muy malos. Resulta que Esteban y Danilo y el Rubio van a terminar siendo unos mansos corderitos al lado del diabólico Esteban! De tan ridículo suena patético.
Todos vimos AMOR en Esteban y Acacia: hemos visto a una mujer que saca esa gata que todas llevamos dentro, se arregla y se mete en el cuarto del hombre que ama, que no puede resistirse a sus besos aún bajo su propio techo, que sueña con el, que está en las nubes luego de que él le lleva flores a su ventana, que le dice a su amor “Me arriesgo contigo” o “Si siento lo mismo que tu”, a un hombre que ha descubierto dentro de sí sentimientos que nadie jamás había despertado en el, que estaba dispuesto a luchar contra el mundo mismo con tal de defender ese amor y que podía enfrentar cualquier cosa, incluso empezar de nuevo, tan solo teniendo a la mujer que ama a su lado. Esa mujer que hemos visto hace tan solo unos 5 o 6 capítulos no se condice con esa niñita indecisa llorosa y asustada de esta última semana, y ese hombre maravilloso, pleno, seguro de sí, dispuesto a todo por amor, a hacer un nuevo camino solo y sin depender, no es el mismo interesado, innoble y cínico que nos quieren vender últimamente.
Ya no quiero darte lata, solo felicitarte una vez mas por tu modo de escribir y tu capacidad de expresar lo que sentís y hacerte eco de lo que muchos sentimos, además de agradecerte por ofrecernos este espacio para compartir nestra opinión y pensamientos con vos.
Saludos desde mi Argentina bella.
Virginia.
Lo primero decirte que la que se ha emocionado con tus palabras he sido yo, gracias, poco más puedo decir.
EliminarLos personajes pueden ir adquiriendo cierta maldad o incluso transformarse repentinamente, pero siempre debe hacerse o bien con continuidad y sentido, o bien mediante un hecho terrible o una situación límite. Pero así como se ha hecho con Esteban, como si le hubiesen dado al botón del on en la maldad, ¡no tiene sentido!
No puedo estar más de acuerdo contigo con lo que dices de estar con alguien por protección, o también por cariño o por compañía. Es en este caso que hubiese sido comprensible una relación con Manuel, ¿pero con el padrastro? ¿Sólo por eso? Vamos, por favor, eso ni en la mente del más moralista podría plantearse así. Pero en cuanto a lo del moralismo, fíjate que no estoy muy de acuerdo, creo que fue más un fallo de planteamiento, de estructura, de historia, que de moralistas atacando. Los auténticos moralistas (que ya me gustaría a mí verlos por un agujerito cómo se comportan en su día a día) no vieron esta novela desde el primer día, sólo se quejaban de la trama, punto. En cuanto a las rufferas, creo que ha habido un problema de planteamiento con Ruffo. ¡Qué fácil hubiese sido darle cierto peso a su personaje! Y con eso todas contentas, las estecias con su querencia, las rufferas con su Ruffo, que si se hubiese vuelto villana mejor que mejor, y las manelitas, pues que hubiesen matado a Ulises a tiempo y listo.
En cuanto a lo que dices de la pareja, es exactamente lo que pienso yo, incluso en lo del final feliz. No sé si habrás leído mi post de los finales, pero lo cierto es que a mí, acorde con la historia, creo que lo más correcto sería la muerte de ambos. Y no porque crea que el amor, por muy prohibido que sea deba acabar en muerte, sino porque sería lo lógico a raíz de las subtramas, y de cómo se planteó en un principio la historia. Pero ahora, ¿qué sentido tiene ahora? Pues ninguno, y por eso están haciendo malo a Esteban sin lógica alguna.
Espero que, una vez acabada La Malquerida, os paséis de vez en cuando para leerme. Siempre me gustó escribir, nunca lo hice, y ahora que empecé, no sé si lo pueda dejar.
Besos desde mi España, de la que reniego mucho últimamente, pero a la que amo. ;)
Laura
ARIADNE DIAZ SIEMPRE SE ME HIZO GUAPA, POR ESO FUE LA RAZON PRIMORDIAL DE QUE EL GUERO CASTRO LA HAYA ESCOGIDO COMO ACACIA, SUPERANDO A ANA BRENDA CONTRERAS. AHORA EL PROBLEMA DE LA ADAPTACION LE PERJUDICO BASTANTE A SU PERSONAJE MAS PARECIA QUE ERA BIPOLAR JAJAJA PORQUE PASABA UNO Y A LA FINAL OTRA, PERO LO QUE SI AGRADA ES QUE SE ENTREGO AL PERSONAJE TOTALMENTE ADEMAS DE LA QUIMICA CON MEIER.
ResponderEliminarQue es guapa, que hay química con Meier... Dos hechos que no se pueden negar! ;)
EliminarEmpezando por recalcar que no soy fan de ninguno de los tres actores y después de verlos por lo menos en un proyecto anterior, me da la impresión de que Victoria Ruffo no quería realizar este proyecto, que la televisora utilizó y sigue utilizando su imagen para vender el preoyecto; es muy dado a que aún cuando los actores quieren o no realizar determinado papel, la empresa se los impida o les exija hacer otra cosa, deacuerdo a como la he visto, porque he estado en la empresa, ella al estar en cualquier proyecto veo que se esfuerza y es muy exigente en que la parte que le toca salga bien a Ariadne no me la he encontrado, aunque me parece muy dedicada y que con este personaje está logrando que de ella se diga algo más que "que guapa" "que linda", ha tratado de demostrar que es algo más que eso; personalmente creo que sí la señora hubiera querido destacar por sobre ellos, no habría tenido ningún problema en exigirlo y a la fecha la tendríamos en el 80% de las escenas, sin embargo estamos a tres semanas de que esto se acabe y la producción no supo si optar por causar pólemica con Ariadne y Meier o explotar la imagen de Victoria.
ResponderEliminarNo digo esto para defender a uno u otro actor ya que ellos son los menos responsables del desastre, pero quienes terminan dando la cara cada noche y recibiendo fellicitaciones e insultos. Muchos han criticado que mientras Ariadne y Meier opinan sobre la historia, Victoria a guardado silencio, pero sí lo analizan al hacer eso está diciendo mucho, sobre todo que no está deacuerdo con la adaptación, que a mi parecer es el sentir general, terminó aceptando hacerla, pero a estas alturas no es el mejor proyecto que ha tenido, no hace menciones de la trama, debe venderse y ayudar a la causa, pero después de más de 30 años de trayectoria creo que lo sabe hacer muy bien, con un simple "saludos y abrazos a tal, tal y tal país" sabe que mantiene a esas personas siguiendola, lo cual se me hace muy inteligente; en el país es una referencia y sí yo he visto dos telenovelas de ella y a medias es mucho; pero esos 17, 18 y 19 puntos no son, por nucho lo que su imagen vende a pesar de que no se le ha visto más que en el papel de sufrida.
Lo que sí es sueguro es que entre ellas no hay más que la relación de compañeras en un trabajo, claramente se nota en como cada una se divierte con todos los demás actores, pero nunca una con la otra, para mí esto me hace admirar a las dos aún más porque como actor debes ser capaz de proyectar lo que tu personaje te exige sin importar la relación que lleves con tu compañero.
Saludos y felicidades por permitirte dar una opinión de esta manera, con argumentos y no sólo como un fan apasionado.
¿Qué decirte? Pues que el tiempo te ha dado la razón en mucho de lo que escribiste. Gracias nuevamente, es genial leer tus comentarios en mis posts, de verdad que me gusta mucho.
EliminarUn abrazo